05 octubre 2010

Viajando por Marruecos (1ª Parte)

En Septiembre Filípides se ha mostrado como un auténtico trotamundos, hemos viajado por Marruecos, han sido unos 7.500 Kms., recorriendo toda la costa Atlántica marroquí, llegando hasta el Trópico de Cáncer.

Han sido muchas emociones, es un mundo muy diferente al nuestro y donde los primeros días son un choque bastante brutal, hemos estado en zonas donde eramos los únicos europeos, por decirlo de alguna manera, pero donde nos hemos sentido integrados y sin ningún problema, te saludan, te miran, todo en un tono muy suave, allí las cosas se hacen sin prisas y como dicen ellos lo que les sobra es tiempo.

Voy a ir colocando entradas con fotos para que podáis ver los sitios donde hemos estado, gente, etc.

Abro este post de Marruecos con un pueblo que me encantó y que se llama................................

ASILAH
 A Asilah la llaman la Perla del Atlántico y no es de extrañar, es una ciudad preciosa, fue territorio español y la ciudad que más me ha gustado en este viaje, pasear por su medina, su gente tranquila, ver las casas encaladas de blanco y con una decoración artística y poder asomarte a la muralla y ver una puesta de sol es algo que hemos echo en Asilah.

Pasamos nuestra primera noche marroquí en Asilah, aquí en un aparcamiento justo enfrente a la puerta de entrada a la medina, era Viernes y finalizaba el ramadán, nunca he visto tanta actividad y tanto movimiento después de que el sol se pone, estaba toda la gente en la calle.
Entrada da la medina y las murallas que la rodean, todas llenas de actividad comercial.
Asilah se caracteriza por la cantidad de artistas que viven en ella, las casas decoradas, blancas y con pinturas que dan la sensación de estar en un museo al aire libre.
Arquitectura típica y detalles de las casas.
Una de las mezquitas, la gente cuando no cabe se sientan afuera y rezan, en la misma acera ves al comerciante colocando su mercancía y a diferentes personajes como al mono Maikel con su amo ó a las mujeres que te hacen tatuajes de hena.
Los coches, las bicis, las motocicletas, la gente, los carros tirados por burros ó los burros solos se mezclan todos y conviven sin problemas.
Esta foto es diferente y me gusta, la mezcla de los espejos con las alfombras y las mantas.
Paseo por la muralla, la playa a tus pies y vimos una preciosa puesta de sol.

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